Diversos puestos de trabajo se ven amenazados por la inteligencia artificial (IA), ya que esta tecnología tiene el potencial de automatizar tareas y reemplazar ciertas funciones realizadas por humanos.
Algunos de los puestos más afectados por la IA incluyen:
Trabajadores en la industria manufacturera: Los avances en la robótica y la automatización pueden reemplazar a los trabajadores en la línea de producción, especialmente en tareas repetitivas o peligrosas.
Conductores de vehículos: Los vehículos autónomos y los sistemas de transporte inteligentes pueden reducir la demanda de conductores de camiones, taxis y otros vehículos.
Cajeros y trabajadores de tiendas minoristas: Los sistemas de pago automático y las tiendas sin cajeros están emergiendo, lo que podría disminuir la necesidad de empleados en cajas registradoras.
Operadores de call center: Los chatbots y los sistemas de respuesta automática pueden realizar tareas de atención al cliente y resolver consultas comunes sin necesidad de intervención humana.
Agentes de seguros y corredores de bolsa: Los algoritmos y sistemas de IA pueden analizar datos financieros y tomar decisiones de inversión o seguros, lo que podría reducir la necesidad de intermediarios humanos.
Trabajadores en tareas de entrada de datos: Los sistemas de reconocimiento óptico de caracteres (OCR) y la automatización de procesos robóticos (RPA) pueden realizar tareas de entrada de datos de manera más eficiente y precisa que los humanos.
No olvidemos que la IA puede amenazar ciertos puestos de trabajo, pero también puede crear nuevas oportunidades laborales en áreas relacionadas con el desarrollo y la implementación de esta tecnología. Además, la interacción humana, la creatividad y las habilidades emocionales siguen siendo altamente valoradas y difíciles de reemplazar por completo por la IA.